centro de estudios del POP

Vamos a saltarnos la discusión inútil sobre el kitsch. La cosa es que la mezcla entre música chilena y música (esteee...) ¿rock?, luego de Los Jaivas no tiene prácticamente ninguna gracia. Tengo tres ejemplos para fundamentar lo que digo.

- Miguel Piñera y Fusión Latina: no sólo por lo impresentable del vocalista, este engendro no era más que un refrito de "Casamiento de Negros" con guitarra eléctrica. Me da lata seguir argumentando algo tan obvio.

- Los Tres: estos muchachones se pusieron primeros en la fila de los exhumadores de Tíos Parra (Roberto, Lalo y no faltará algún Lamberto o Efigenio Parra por re-descubrir), y por tanto ganaron plata tal como Ry Cooder con los vetustos cubanos de la película esta. Todo fue un cover, una imitación incluso. La Yein Fonda, Peineta, las cuecas unplugged y todo eso. Los viejos cantan mal, hay una especie de condescendencia como de "pobre tatita" y "puta que somos la raja". Y el Liguria y la cumbre guachaca y vamos haciendo la mueca de que nos gusta el causeo y el bolero. René de la Vega y esa pesadísima onda kitsch.

- Mecánica Popular: el grupo apostaba, sin ironía kitsch, por mezclar el nervio beatle con letras serias y redactadas del tipo "silvio". Melancolía, amores artesas, el toque urbano bien UP y aplicado. Alguien podría decir que esa estética, porque la izquierda es una estética, es lo más kitsch de todo. Claro que esa no era la intención. Lo más probable es que no se entendió como pop. Y para la familia charanguística, siempre será preferible el Inti o derechamente esos casets pirateados de Napalé que tienen debajo de los CDs de Ismael Serrano-Pedro Guerra-Sabina.

Entonces, Gepe. Que es en serio. Que no imita. Que canta ingenuamente, pero sigue con la estética naif cuando habla (casi como un mocoso de provincia, que ciertamente no es) y cuando se viste y se peina como transeúnte anónimo, que tampoco es. Ni siquiera es de izquierda. Y ayer tocó en el reducto que le va quedando a la peña folklórica, pero ciertamente no para ellos. Nada de Che Guevara ni cosas: el repertorio que llevó es una apuesta muy clara por cultivar un estilo, sea con guitarra, teclado o a capella. De allí la sensación de parecido entre los temas. Tonadas, cuecas, covers de Violeta Parra y Los Jaivas. También se nota que al muchacho ha escuchado mucha otra música, norteamericana de baja fidelidad posiblemente, pero quién sabe.

La cosa es que esto sería New Trova, de una vez por todas. Posiblemente le interese más a quienes escuchan a Devendra Banhart que a la rancia familia de la Casa en el Aire. Pero esto es el folk chileno.